Un café con Mundo y John

Brother Mundo, natural de Santa María del Campo, llegó a Zambia en 1983 y su primer destino fue el colegio de St. Pauls en Kabwe, en el centro del país. El mismo destino que pisó Brother John, desde su Malasia natal, en 1971 para comenzar su misión en Zambia.

Ambos hermanos han pasado sus últimos días de trabajo en el Saint Marcelins Centre de Chibuluma hasta el día de hoy, 5 de mayo, que regresan a sus respectivos países, principalmente por motivos de salud. Antes de su marcha, nos dio tiempo a compartir algunas anécdotas y experiencias vividas en estos más de 30 años que han estado en Zambia.

Me contaban que los comienzos fueron más difíciles, ahora todo va mejor. Por ejemplo,  al principio, en Saint Pauls, el único coche que había era el de los Maristas, así que muchas veces tenían que llevar a personas al hospital más cercano (Kabwe a 30km), principalmente atendían a mujeres embarazadas. Mundo recuerda que una vez no llegaron a tiempo y la mujer dio a luz en el coche. Gracias a un proyecto de SED, se construyó una clínica y casas para enfermeras por lo que la vida de los vecinos de St. Pauls mejoró considerablemente. fotodespedida

Los dos recuerdan, como los primeros años, bajo el mandato de Kaunda (primer presidente de Zambia) no había libertad de expresión y tenías que tener cuidado con lo que decías, ya que el gobierno tenía vigilantes y si decías algo en contra podían denunciarte a la policía. Mundo recuerda, a los meses de llegar, que fue a Lusaka con otro hermano y querían hacer una foto a un edificio bonito, pero no les dejaron y les llevaron a la comisaría. La situación cambió en 1992, año en el que se realizaron las primeras elecciones multipartidistas.

Los dos se han dedicado a la enseñanza en estos años (además de tareas de mantenimiento, cocina, jardinería…). Mundo comenzó dando clases de geografía en St. Pauls y ha terminado su labor en Zambia como director del Skills Training Centre. Brother John ha sido profesor de todas las asignaturas pero en su última etapa en el colegio de secundaria y en el Skills ha sido profesor de matemáticas. John recuerda una anécdota que ocurrió a pocos meses de llegar, estaba en un tiempo de estudio con los internos del colegio de St. Pauls y hubo un terremoto, uno de los alumnos, Otto Moyo, se levantó y gritó “es el espíritu de Kapwepwe” y salió corriendo de la habitación.

despedida

A nivel educativo, aunque se ha avanzado mucho, me cuentan que siguen viendo algunos desafíos como pueden ser: la falta de infraestructuras y profesorado, especialmente en zonas rurales; la falta de interés y motivación por parte de algunos profesores o falta de planificación en la toma de decisiones.

A la pregunta de qué es lo que más van a echar de menos, los dos coinciden: la gente. Van a echar de menos la amistad de la gente, su sencillez, el trabajo duro, lo fácil que es hacer amigos y las charlas y conversaciones con ellos.

Brother John quiere mandar un mensaje a los jóvenes españoles: “venid a África para ver como es, como se vive aquí y tener una experiencia diferente”, yo os lo transmito desde este blog y me uno a la recomendación.

Brother Mundo manda “a big thank to SED”, ya que gracias a la ONGD se pudo construir todo el centro educativo que tenemos ahora,” lo hicieron fácil”. Mundo fue el coordinador, junto con el hermano Felipe, de la construcción del colegio, el skills, el centro juvenil y el salón de actos, los 4 edificios que componen este centro educativo marista en Chibuluma. Mundo bromea y dice que si ahora le dijeran realiza este proyecto diría que es imposible. Pero la verdad es que lo hizo.

Desde aquí mi homenaje a estas dos grandes personas que han dedicado su vida a mejorar la vida de los demás, seguro que lo seguirán haciendo en sus respectivos destinos. No es fácil decir adiós a personas que han trabajado tanto, humildes, sencillas, serviciales, cariñosas con todo el mundo, de las que aprendes tanto y con las que te puedes reír tanto. Hoy la comunidad de Chibuluma se queda un poquito huérfana con su partida.

Os echaremos de menos Ba Brothers.

Twatotela. Gracias.  Xié – Xié.

Lucila Bergareche, voluntaria de SED

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