Estos días en Horizontes al Futuro son un poco distintos de la rutina habitual. La mayoría de los chicos están de vacaciones en la semana del estudiante. Pero aun así hay varios niños de los pequeños y medianos y también están los mayores que trabajan en los talleres de mecánica y hacen prácticas.
Han sido días muy intensos, a parte de realizar tareas escolares y jugar y cantar con ellos, nos hemos dedicado a visitar con el H. Goyo a las familias de los niños que no han ido con ellas. Hemos tomado contacto con la realidad de Honduras. Mucha miseria. Hemos estado también ya en la comunidad con los hermanos y paseando por la ciudad.
Cada nombre de los chicos de Horizontes tiene detrás una historia marcada por la pobreza, la miseria, la violencia , pero sin embargo la labor que se hace desde Horizontes al Futuro es enorme y preciosa no solo con los chicos si no con las familias de ellos tanto en formación como en apoyo económico e igualmente a tantas personas que llaman a la puerta de Horizontes.
El trabajo, que hace Don Goyo como le dicen aquí no tiene descripción. Yo sabía que aquí era una autoridad pero es su esfuerzo, entrega y cariño hacia las personas lo que hacen que entienda su misión y vocación. Es un privilegio compartir con él esta labor durante estos días y sus explicaciones continuas que nos ofrece.
Y a pesar de todo, destacar la alegría de los chicos. Son felices en Horizontes.
Carolina, voluntaria SED en Honduras