Archivo10 octubre, 2023

1
Con el corazón en la mano

Con el corazón en la mano

Así nos recibieron todos, los hermanos de la comunidad, los niños y los educadores del Centro “Sfantul Marcelin Champanat” .

Desde la llegada al aeropuerto de Bucarest el día 30 de julio, hasta el 24 de agosto que uno de los hermanos nos dejó en el mismo aeropuerto de vuelta a casa, nos han acompañado, abrazado y cuidado. Pero lo más importante es que han despertado nuestra conciencia adormilada al darnos la oportunidad de vivir una realidad tan diferente a la nuestra.

En la formación previa, algo que agradecí mucho, aprendí que “el día a día” marcaría el ritmo del CTM y que era tan  importante el “estar” como el “hacer”. Y ese fue justamente el ritmo allí, lo que cada día traía y el estar al lado de todos y todas, compartiendo todas las cosas ordinarias (que allí parecían extraordinarias), vivir con ellos y para ellos (niños/as y hermanos).

Cada día fue diferente, pero todos muy intensos mezclados de rutinas y emociones fuertes. Actividades de trabajo pocas: tareas domésticas en colaboración con los hermanos dentro de la comunidad y pulseras solidarias con los niños que me ayudaron mucho a conectar con ellos.

Acompañamiento continuo y una convivencia profunda llena de cariño por todas partes que han conseguido sentirme de la familia, familia de todos: niños, hermanos, voluntaria Esmeralda y los educadores que he conocido.

Una nota de mi diario del día 22-09-23 dice:

Siento ganas de volver a España pero, creo que también podría quedarme aquí para siempre. Siento que cada día ha traído UN FIN y que detrás de todo esto está DIOS.

Es la primera vez en mi vida que he estado tanto tiempo fuera de casa y siento que esta experiencia ha sido un regalo de Dios.

 

Vicenta Rodríguez Aparicio | Voluntaria Rumanía 2023

 

 

 

Copyright © 2014. Todos los derechos reservados. Desarrollo web: www.startidea.es