B’antiox (gracias)
Es lo único que puedo decir a toda esa gente que he conocido durante este mes y medio, b’antiox (gracias).
B’antiox, a todos los profesores y compañeros que me he encontrado en el colegio de Futuro Vivo, tanto de Guatemala como de Samac. Desde un principio fue una acogida espectacular, me he sentido siempre muy acompañado.
En este tipo de experiencias, siempre se habla de las sonrisas de los niños y niñas, pero esas sonrisas no son más que el reflejo de la alegría y ganas de seguir adelante que sus profesores les transmiten día a día. Ellos son los que empujan y motivan a esos niños y niñas a seguir yendo a la escuela para aprender, jugar y reír.
B’antiox, a esos compañeros de trabajo, que además de compartir tiempo con ellos en la escuela, nos han abierto las puertas de su casa invitándonos a comer, dándonos en muchas ocasiones lo que no tienen para darnos la bienvenida a su casa.
Es una experiencia única estar en sus casas, que te preparen el plato de las celebraciones especiales, Kaq’ik (caldo de gallina), que te pregunten “¿De donde viene usted?”, ¿Por qué está en nuestro país?, “¿Le ha gustado el país?”, “¿Va a volver?”… y todo ello siempre buscando agradarte y haciéndote sentir cómodo.
No siempre es fácil entenderse, ya que en muchas comunidades, las mujeres en su mayoría, no hablan español, pero siempre muestran una sonrisa de curiosidad y vergüenza por tu altura, por como comes, por como bailas, por como juegas con sus niños y hasta por como lloras, ya que no se acostumbra a ver hombres llorando, y aquí en las despedidas se llora y mucho.
B’antiox, a todos los voluntarios con los que he compartido esta experiencia, Luis, Joel, Francisco y, desde un inicio compañera, Silvia.
Es difícil y muy importante encontrarse con gente con la que desde un inicio tienes una buena conexión. Los intereses que compartimos son los mismos o muy parecidos y nuestro objetivo con este voluntariado también, de modo que todo ha ido sobre ruedas y ha hecho posible que disfrutemos con más alegría e intensidad todos los momentos.
Bántiox, a los niños y niñas de la escuela que cada mañana regalaban sonrisas, abrazos, cartas, dibujos… Desde el primer día que llegué era “Profe”, luego más tarde pasé a ser “Profe Hugon” y finalmente “Profe Ibon”.
Un recuerdo imborrable, la música en el inicio de los desayunos y las comidas para los 183 alumnos de las escuela, los bailes durante el desayuno y la comida, las clases con los alumnos, la preparación del baile para el día de la competición, los juegos después de comer y el traslado de los alumnos a las comunidades de Chicoj Raxkix, Chituj o Sanimtaca.
B’antiox, por último a la Hermana Altagracia, Hermana Uti, Hermana Sabina y la Hermana Katy por lo bien que nos han cuidado durante todo este tiempo. Siempre atentas por cualquier necesidad que pudiéramos tener.
Gracias en especial a la hermana Katy, con quién más tiempo y charlas he compartido, de la que he aprendido mucho y de la que echaré de menos esas preguntas para hacerme pensar un poquito más y plantearme cosas nuevas que hasta entonces igual no me había parado a pensar o discutir.
Un placer haber estado compartido esta experiencia contigo, y gracias por hacer mirar un poco más dentro de mí, pero también por enseñarme a ver, mirar y sentir a los demás con otros ojos (ohos). Estas Hermanas, que están dando su vida por los niños de la escuela para que puedan tener dos comidas al día, educación, diversión y un futuro esperanzador, son el pulmón de este proyecto.
Futuro Vivo, que es así como se llama el proyecto, cuenta con un colegio en Ciudad de Guatemala con 23 años a sus espaldas, que está dando sus frutos con alumnos que comenzaron a estudiar aquí y ahora mismo están trabajando en puestos que requieren una formación, formación que ha sido adquirida gracias a este proyecto.
Por otro lado, cuentan con un colegio de Futuro Vivo en Samac, proyecto que dio su inicio hace ahora 6 años, y ha conseguido que niños y niñas de poblaciones indígenas aprendan español, estén escolarizadas y tengan desayuno y comida asegurada de lunes a viernes.
La escolarización de todos estos niños y niñas es más importante que nunca para conseguir así que estén alejados de peligros como el narcotráfico y las maras, que abundan en el país.
Como última aportación a este foro, me he dado cuenta de que Guatemala es un país del que se desconoce toda la inmensa riqueza que posee.
En cuanto a la riqueza natural, cuenta con 37 volcanes, 76 endemismos en fauna y 515 plantas endémicas y 770 especies de orquídeas. Las especies representativas del país son el árbol de La Ceiba, el ave quetzal (que da nombre a la moneda de país) y Monja blanca, orquídea que es la flor nacional.
Además, en el país se hablan 23 idiomas diferentes y cuenta con una grandísima historia en torno a la civilización Maya, muy presente en la actualidad, en la agricultura sobre todo.
Se siguen realizando ofrendas a los dioses Mayas para pedir una buena cosecha para el año siguiente, ejemplo de estas ofrendas son: una tortita hecha con la mejor mazorca de la cosecha anterior, el antes mencionado Kaq’ik y también se ofrece un incienso realizado con la resina del árbol Bursera, y todas estas ofrendas siempre se realizan en el centro de la tierra que va a ser sembrada.
Bursera y su leyenda
Cuenta una leyenda que la bella Doncella llamada Calahuit Pon, imploró al cielo y a su amado para protegerla de un ataque y una cruel agresión por parte de unos malos hombres, en ese momento corrió llena de desesperación entre el bosque y un árbol gigante, la Bursera, la absorbió para resguardarla y ocultarla de sus perseguidores, a partir de ese momento, el árbol empezó a llorar eternamente.
Las lágrimas que escurrían por el tronco, se convirtieron poco a poco en la resina olorosa y perfumada, que es el alma enamorada de Calahuit.
Ibon | Voluntario SED Guatemala (Cobán, Samac)
El amor salva! Y vos sos puro amor! Hermosa experiencia, emociona leerte, gracias por compartir, abrazo apretujado